(ANA) .- La Secretaría de Energía de la Nación resolvió que desde el 1 de julio todas las estaciones de servicio que estén ubicadas en las capitales provinciales deberán dejar de comercializar diésel común y tendrán que remplazarlo por un combustible que sea menos contaminante. No obstante, esta medida no abarca a las capitales de la Patagonia austral.
La disposición de la Secretaría de Energía de la Nación apunta a mejorar la calidad de los combustibles de uso masivo y a su vez, la calidad del aire de los grandes centros urbanos. En definitiva, promover el cuidado por el medio ambiente.
Por esto, a partir de los primeros días de enero YPF sumó a su oferta de combustibles el nuevo Diésel 500, un producto más amigable con el medio ambiente, que contiene menos azufre que el gasoil común y que optimiza el rendimiento de los motores.
Lo que sí está claro es que desde el 1 de julio de este año todas las capitales provinciales (están exceptuadas aquellas ubicadas en la Patagonia como Ushuaia, Río Gallegos y Rawson) tienen que dejar de vender el gasoil común.