La enorme tormenta solar, que llegó esta semana a la Tierra, alcanzó su máxima actividad anteayer al mediodía y amenaza con generar problemas en los satélites de comunicaciones de órbita polar, dañar las redes de comunicaciones, telefónicas y transformadores eléctricos, c
omo asi también afectar las frecuencias de onda corta como las radios FM.
El «bombazo» enviado por el Sol, de clase M8,7 -muy cerca de la intensida
d máxima- liberó una impresionante tormenta geomagnética equivalente a millones de bombas de hidrógeno y según los datos recogidos por el Centro de Clima Espacial Goddard , de la NASA, la eyección de masa coronal se movía a 2253 km por segundo en dirección a la Tierra. (lanacion.com.ar)