Cultora de un bajo perfil, pero no exenta de escándalos, la farmacéutica pasa desapercibida por las calles de Río Gallegos. Una vida lejos del poder y los infortunios.
María Cristina Kirchner es la menor de los tres hermanos. En el círculo íntimo de la familia es conocida con el apodo “Macri”. Las paradojas del destino y los vaivenes políticos hicieron que, tanto su hermana Alicia, la actual gobernadora santacruceña, como su cuñada, la “Cristina” más conocida, eviten ese sobrenombre. Farmacéutica de profesión, ostenta un cargo en el área de Salud de Río Gallegos que tiene que ver con Capacitación y dirige, además, la farmacia del hospital regional en la capital santacruceña.
Por cuestión generacional, María Cristina tuvo un trato preferencial por parte de sus hermanos. La amplia diferencia de edad la forjó con una personalidad diferente a Néstor y Alicia, cuyas ambiciones políticas los llevaron a los cargos más altos. Los datos filiatorios dan cuenta que nació un 15 de julio de 1961 y es la hija menor del matrimonio entre Néstor Carlos Kirchner y María Juana Ostoic Dragnic.
Los años de juventud la mantuvieron lejos de las movidas políticas. Sus hermanos, radicados en La Plata y Neu-quén, no lograron marcar una influencia o determinación partidaria. Por tal motivo, su adolescencia transcurrió como la de cualquier joven y con el privilegio de contar con la exclusiva atención de sus padres.
Su formación profesional coincidió muy poco con el ascenso de Néstor Kirchner a la intendencia de Río Galle-gos, ya que sus prioridades eran estudiar Farmacia en Buenos Aires y el retorno a la democracia ya no caracterizaba la misma lucha que había impregnado a sus hermanos la vocación por la política. Sin embargo, su retorno a la capital provincial no la mantuvo alejada del poder que ya ostentaba la familia a fines de la década del ’80.
Libre de pecados
“Macri” tiene con su marido, Julio César Spitaleri, una carnicería llamada “ La Gran Aventura ” en el centro de Río Gallegos. Dicho local en más de una oportunidad quedó en la mira, no sólo por evadir los controles de AFIP, sino también por las reiteradas denuncias de los vecinos por la venta de productos en mal estado. En este contexto, su esposo tuvo varias veces el centro de la atención, tanto por su desempeño como síndico de Servicios Públicos Sociedad del Estado, como también por su rol como prosecretario del Tribunal Oral Federal, cargo para el que, manifiestan, nunca concursó.
Estas razones retrajeron aún más la exposición de la hermana de la actual Gobernadora. Su única aparición en público fue durante la asunción presidencial de Néstor Kirchner, el 25 de mayo de 2003. Para ese entonces, pocos sabían en el Congreso de la Nación que la escolta de la madre del Presidente era la hermana del mandatario. En ese período, no se la volvió a ver por la Quinta de Olivos, en la Casa Rosada , ni tampoco durante el fallecimiento de ex presidente. Solamente custodió a sus sobrinas (Natalia y Romina Mercado) durante la inhumación en el Cementerio de Río Gallegos.
Distanciada de su cuñada, comenzaron las especulaciones. La relación entre ambas no gozaría de buena salud, y mucho menos después de los escándalos devenidos en la gestión de CFK y las causas que la investigan por el dudoso crecimiento de su patrimonio.
En este aspecto, la “otra Cristina” marca la diferencia. Lejos de las ostentaciones, vive en una modesta vivienda de la calle Cañadón Seco en la capital santacruceña y, apartada de la exposición, varios dirigentes provinciales la recuerdan como una persona amable, pero introvertida, virtud que hizo que en numerosas oportunidades pasara desapercibida por los vecinos. Así lo indicó a La Tecla Patagonia el senador radical y ex intendente Alfredo Martínez, quien señaló: “Hay gente que se la cruza por la calle y no sabe que es la hermana de Néstor y Alicia Kirchner”.
A pesar de ello, María Cristina Kirchner (Macri) no pudo escapar a la embestida judicial. Su nombre quedó ligado a las irregulares compras de tierras a precios viles en la localidad de El Calafate. Con menor o mayor grado de exposición, y también patrimonio financiero, el apellido sigue dando qué hablar. Y la hermana menor de la Gobernadora , no fue la excepción.