Lilian García, en carácter de intendenta interina, determinó la convocatoria a Daniel Peralta y a su gabinete en un plazo de 48 horas, además de conminar al Consejo Provincial de Educación que suspenda el dictado de clases en la localidad. La crisis que atraviesa Río Turbio ya es profunda, y las medidas tomadas por el Ejecutivo apuntan a poder mantenerse y ordenar los diferentes focos de conflicto. Luego de un fin de semana complicado, con reclamos, insultos y convocatorias multitudinarias, la presidenta del Concejo Deliberante, Lilian García, emitió un decreto que convoca al gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, a que se “constituya en la localidad en un plazo perentorio de 48 horas, a fin de dar cuenta y respuesta ante la comunidad, sobre la situación económico – financiera que pone en estado de alerta operativa a todas las Instituciones Públicas”. El decreto, hecho por la investidura que ostenta García al ser la intendenta interina, también comprende un pedido al Consejo Provincial de Educación, para que suspenda las clases en todos los establecimientos educativos de Río Turbio, debido al mal estado edilicio en los mismos. En este documento puede leerse una serie de justificaciones, que se dirigen a intentar explicar la realidad que atraviesa la localidad. Señala los inconvenientes energéticos y de suministro de agua y gas, los problemas edilicios y sanitarios en establecimientos públicos y la ya habitual tensión generada por la falta de regularidad en el cobro de haberes por parte de los empleados municipales. Los vecinos rioturbienses pidieron expresamente que las autoridades tomen participación activa en este difícil momento, y el decreto publicado vendrá a poner las cosas en sus lugares, o por lo menos, lo intentará. Finalmente, puede advertirse las firmas de Lilian García, intendenta interina; de Francisco Castellón, secretario de Producción, Turismo y Medio Ambiente; María Laura Gaitán, secretaria de Economía y Administración; Arturo Matus, secretario de Obras y Servicios; Tamara Cowes, secretaria de Desarrollo Social y de Vanessa Mazú, secretaria general de la Municipalidad.
Foto: Diego Moreu