La entrada a la Mina 5, punto neurálgico del yacimiento carbonífero de Río Turbio, continuaba tomada anoche por los trabajadores de YCRT dado que la suspensión de las primeras 215 notificaciones de despido solo fueron desestimadas de palabra por el interventor Omar Zeidán. La gobernadora Alicia Kirchner llegó ayer a la zona del conflicto para reunirse con los intendentes de las dos ciudades de la cuenca carbonífera.
La gobernadora Alicia Kirchner, quien el miércoles había transmitido su solidaridad a los trabajadores que la recibieron, decidió viajar a Río Turbio acompañada por varios miembros de su gabinete y al promediar la tarde de ayer también tenía previsto mantener un encuentro con miembros de la Intersindical, pero no se confirmó si haría lo propio con autoridades de la empresa.
En este aún irresuelto conflicto laboral que alcanzó repercusión nacional a través de medios periodísticos metropolitanos, fueron las masivas movilizaciones de los obreros y vecinos de Turbio y 28 de Noviembre, las que forzaron a Omar Zeidán a frenar, por ahora, los masivos despidos enmarcados en la política de reducción presupuestaria delineada por Cambiemos, estructura política a la que pertenece.
Además, la continuidad de la toma de la Mina 5 se debe a la probabilidad de que las cesantías vuelvan a cobrar vigencia en caso de fracasar la mesa de diálogo con la Intersindical, a la cual YCRT convocó para la semana venidera pero lejos del sitio del conflicto, es decir, en sus oficinas de Buenos Aires.
En este contexto, se están cruzando fuertes críticas entre funcionarios y legisladores del FPV con otros referentes políticos de Cambiemos de esta misma provincia.
Estos últimos defienden la política de achique sin medir las consecuencias que podrían ocasionar las pérdidas de fuentes laborales en comunidades de reducida densidad demográfica, sobre todo porque las estimaciones indicaban que oscilarían entre 400 y 500 sobren total de 2.700 trabajadores que integran la planta, incluyendo a quienes cumplen funciones en Río Gallegos, en la terminal ferroportuaria Punta Loyola y en las cómodas oficinas de la Capital Federal.
“CRIMEN SOCIAL”
“La gente no puede permitir este crimen social con esta cantidad de despidos”, expresó Miguel Páez, secretario general de ATE Río Turbio en declaraciones formuladas ayer al diario Tiempo Sur.
El dirigente ratificó que los trabajadores, sus familias y otros vecinos decidieron mantener al alerta luego de la masiva movilización del miércoles, respaldando la decisión de la Intersindical y sus bases de mantener el bloqueo a la Mina 5 ya que la situación continúa siendo angustiante.
Páez comentó que hasta el momento solo se logró forzar a YCRT a concertar una mesa de diálogo ya que no está firme que queden definitivamente sin efecto las notiticaciones.
“Nos recibieron y nos dieron una serie de respuestas y nosotros dijimos que esta situación se va a desbordar si no se resuelve de manera inmediata”, afirmó.
También reveló que el interventor Zeidán les dijo que “los compañeros que tienen telegrama en mano pueden ir a marcar hasta tanto se habilite la mesa de diálogo”, lo que deja en evidencia que “están midiendo la temperatura de la gente”.
(iF)El Patagonico