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Desde las cámaras del sector tomaron como referencia la suba de la compañía Oil, en torno al 6 por ciento. Aseguraron que “es para compensar los aumentos en el precio internacional del crudo y el alza del dólar”.
Oil había adelantado que la nafta Súper pasará de $ 25,40 a $ 26,924; la Magnum de $ 28,80 a $ 30,524; la Premium de $ 25,29 a $ 26,80, y el Diesel de $ 21,34 a $ 22,62. El incremento traerá cola y el resto de las empresas expendedoras de combustibles no tardará en acomodar sus precios.
El gerente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA), Guillermo Lego, confirmó el ajuste y consideró que “si aumentan el 6 por ciento, eso se transforma en un valor tentativo y habrá que ver qué hace el resto de las compañías”.
“Por lo general, la experiencia indica que cuando una compañía aumenta sus precios, en el término de 48 o 72 horas el resto de las petroleras acomoda sus precios de acuerdo a esos valores”, recordó.
Por su parte, Oscar Días, secretario de CECHA, señaló que “hasta el momento el único anuncio oficial que hemos recibido es el de Oil, pero entiendo que con el correr de las horas se plegará al ajuste de precios el resto de las compañías, como sucede habitualmente”.
Además, la presidente de la Federación de Expendedores de Combustibles (FECRA), Rosario Sica, confirmó también el incremento y consideró que “seguro el resto de las compañías modificará sus precios”.
“Menos mal que las compañías se calmaron un poco, porque las versiones indicaban que el aumento llegaría al 11 por ciento, pero el 6 por ciento decidido ahora aparece como más razonable”, agregó Sica.
(iF)La Opinion Austral
