Chubut.- El intendente de Comodoro Rivadavia, Néstor Di Pierro, presidió la apertura del 42° periodo de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, espacio en el que brindó un balance de estos primero dos años de gestión y enumeró los objetivos para el futuro, pidiendo la colaboración de toda la comunidad. El jefe comunal aseguró que la batalla de su gestión será al narcotráfico.
En primera instancia, el jefe comunal expresó que “han pasado poco más de 26 meses de esta gestión y nunca nos hemos apartado de lo que nos comprometimos, al tomar decisiones trascendentales, junto a este cuerpo deliberativo, con el cual continuamos avanzando en la transformación de la ciudad con políticas de fondo”.
Por otra parte, hizo hincapié en un punto que es eje central de la gestión municipal, tal como el cambio cultural que se pretende concretar en la ciudad, buscando la recuperación del sentido de pertenencia, cuestión que permitirá luchar unidos, defendiendo los intereses de la ciudad.
El intendente, marcó como una problemática central de la ciudad, a la inseguridad y aseguró que esta cuestión, no se arregla “con más policías, debemos profundizar la prevención, por ello aportamos 30 cámaras de video vigilancia y su correspondiente monitoreo, que hoy ya supera las 100”.
“Completaremos el control de los accesos, en el norte y en el sur de nuestra ciudad, por tierra y por aire, suministrando los recursos que sean necesarios. Estamos prestos a dar la batalla al principal flagelo de nuestra sociedad, que es la droga”, sostuvo.
En torno a la situación de los servicios básicos esenciales, que preocupa a la comunidad en general, Di Pierro indicó que “hoy es una realidad la concreción de la segunda etapa del acueducto Lago Musters – Sarmiento – Comodoro Rivadavia – Rada Tilly – Caleta Olivia. Más de 350 millones de pesos se han volcado en esta obra, que permitirá el abastecimiento a nuestras localidades para las próximas décadas”.
En la misma línea, agregó que “en conjunto con la Provincia del Chubut se trabaja en la puesta en operación y desarrollo de los acuíferos de Manantiales Behr, la Corona, y el Trébol; actual paliativo y fuente natural del recurso agua que aporta a una ciudad en constante crecimiento”, subrayó el jefe de la ciudad.
En otra parte de su discurso, Di Pierro se refirió a la Ordenanza de Responsabilidad Social Empresaria, que implica que el Estado debe regular los estándares mínimos por donde debe encauzarse la actividad empresarial, imponiendo los incentivos y restricciones necesarios para proteger el interés general y el beneficio de los sectores involucrados.
“Es el Estado y no las empresas, quien debe fijar los intereses que deben atenderse y la forma de protegerlos, y determine las prioridades y las políticas en materia de bienestar social, protección al medio ambiente, controles, etc., por considerarse más conveniente y, sobre todo, más democrático”, enfatizó el jefe comunal.