Las reparaciones del acueducto troncal que se hicieron entre Cerro Dragón y Valle Hermoso no garantizaron la normalización del suministro a Caleta Olivia. Dos cañerías del tramo que abastece a esa ciudad, una en la zona de La Herradura y otra ubicada a solo ocho kilómetros de la zona urbana, estallaron a media tarde de ayer cuando se reanudó el bombeo y el material no resistió la presión.
Al producirse las averías de ayer, las reservas de agua en Caleta Olivia ya eran muy bajas y apenas se aliviaban con el aporte de los acuíferos de zonas de mesetas, lo cual hacía que en algunos barrios el suministro por redes domiciliaria fuera insignificante y hasta nulo desde hace varios días.
Gran parte de los vecinos, acostumbrados a este tipo de vicisitudes, venían afrontando la escasez de suministro con varios tanques domiciliarios, pero el nuevo corte hizo que la situación se tornara más que preocupante y en la práctica, la ciudad comenzó a afrontar otra etapa de emergencia hídrica aunque el municipio no la declaró formalmente.
El propio jefe del distrito local de la empresa Servicios Públicos Sociedad del Estado, Claudio Olivares, confirmó las dos nuevas roturas en los sitios mencionados a Diario Patagónico. Indicó que las reparaciones recién comenzarán a primera hora de hoy.
En consecuencia, se puede estimar que la hora de normalización del suministro se desplazará al menos hasta mediodía de mañana ya que hay que esperar que se llenen las principales cisternas y, por sobre todas las cosas, que no haya otras rotura del ducto troncal.
ADVERTENCIA DE ACCIÓN DE AMPARO Y MALHUMOR
La nueva emergencia disparó otra vez situaciones de bronca entre la comunidad, pero además volvieron a generarse acusaciones cruzadas en distintos ámbitos.
En principio, volvió a congestionarse de camiones cisternas el cargadero municipal y algunos de los móviles que debían llevar agua al Hospital Zonal demoraron su servicio debido a que los choferes debían respetar turno.
Esto hizo que la dirección del nosocomio advirtiera que presentaría una acción de amparo por no tener prioridad de abastecimiento, lo que motivó que Servicios Públicos habilitara un improvisado cargamento en la zona del barrio Centenario, afectando la presión de agua que llega al ubicado en barrio Unión.
En este último lugar, los camioneros dijeron que la empresa provincial los discriminaba y por la baja presión, debían aguardar una hora y media para llenar tanques, mientras que antes no se demoraban más de media hora.
A todo esto, los mil litros de agua que hasta hace pocos días los vecinos pagaban 100 pesos, ayer su precio trepó a 130, pero igualmente el servicio era muy lento y los pedidos databan de hace tres días.
A menos de cien metros de ese lugar, en canillas ubicadas en el Estadio Municipal, decenas de personas hacían fila para llenar bidones y otros llegaban con tanques de gran capacidad montados en camionetas o carros arrastrados por automóviles.