La diputada Blanco de Peralta fue contundente y volvió a marcar posición diferente al resto del bloque del Frente para la Victoria. Votará en contra de los proyectos de ley presentados por el Ejecutivo Nacional que buscan modificar aspectos del Poder Judicial y que fue presentado por la Presidenta Cristina Kirchner como “democratización de la Justicia”. “Quizá los que actúan mandados por celular no puedan entender lo que es actuar en base a los principios de toda una vida”, disparó la representante de Santa Cruz en el Congreso de la Nación.
La legisladora santacruceña, que integra el bloque Frente para la Victoria, mantiene desde hace tiempo una autonomía que se explicita en cada una de las votaciones. Es sin duda, un número menos cuando se cuentan las manos que se levantan automáticamente.
“Voy a acompañar los proyectos y las medidas que yo considere, desde mi entender, que vienen a beneficiar a la gente. No voy a levantar la mano indiscriminadamente cuando lo que se esté considerando vaya en perjuicio de mis ideas o mis principios”, sentenció la diputada nacional.
No es la primera vez que la diputada argumenta sus diferencias con los lineamientos del Ejecutivo Nacional, pero también destacó coincidencias. “Como Peronista jamás podría haber votado la nueva ley de Riesgo de Trabajo, y no lo hice. Sin embargo, en el caso del acuerdo con Irán consideré que era una decisión de política internacional y que debía acompañar la propuesta del Ejecutivo”.
En cuanto a los proyectos de la reforma judicial, la legisladora no dejó lugar a confusiones: “Los puntos centrales de estos proyectos no los puedo acompañar. La restricción de cautelares establece que el Estado con una simple apelación puede dejar sin efecto una cautelar presentada por un ciudadano que considera estar siendo lesionado. Si con una simple apelación se detienen los efectos suspensivos del acto a discutir y puede continuar la lesión provocada por el mismo, en realidad lo que estaríamos haciendo es convertir a las cautelares en un sinsentido jurídico. El Estado no debe sacar leyes para protegerse a sí mismo sino que debe proteger al ciudadano”.
Para Blanca Blanco, es clave mantener las mayorías especiales: “La suspensión de magistrados con una mayoría aminorada respecto de la actual resulta, a todas luces, peligrosa. No es un acto caprichoso que hasta el día de hoy sea necesaria la mayoría especial, en todos los poderes del Estado son necesarios los dos tercios. Además, el Consejo de la Magistratura, debe tener una conformación plural, donde estén representados todos los sectores y donde los jueces no sean elegidos por su orientación política partidaria”.
“Creo que no se ha buscado el consenso y no se han dado los plazos mínimos para que, tanto diputados como senadores, podamos estudiar discutir y analizar cada uno de los proyectos. Semejantes modificaciones a un Poder de la Nación merece, sin dudas, plazos de estudio mucho mayores. Creo que, a esta altura nadie niega la necesidad de una reforma del Poder Judicial, sin embargo para que tenga la fuerza necesaria necesitamos lograr un consenso mucho más amplio y no encerrarnos sólo en los votos propios”.
Cuando le consultamos por ciertas versiones que se escuchan en la provincia sobre su voto negativo, la Diputada fue categórica: “Cuando voté a favor dijeron que había un pacto secreto, hoy dicen que es una venganza contra el Ejecutivo Nacional. Quiero ser clara con algo, es mi decisión sobre el estudio de los proyectos. Nada tiene que ver con lo que los legisladores provinciales que responden a La Cámpora hacen con el gobernador y pueblo de Santa Cruz; ellos no votan y cajonean los proyectos que implican una mejor calidad de vida de nuestros vecinos. Han sido muchos los casos, la gente los sabe: el impuesto inmobiliario minero que resulta tocar apenas un poco la fabulosa renta minera; tampoco tiene que ver con la actitud intervencionista del ministro de Planificación, quien maneja a su antojo la obra pública en mi provincia; tampoco con la decisión del ANSES de retirarle el aporte al déficit de nuestra caja provincial de jubilados sin devolver el 15 por ciento de coparticipación que fue convenido para dicho tema en el Pacto Federal. Tampoco tiene que ver con que el ministro de Defensa vaya a abrir unidades básicas a Santa Cruz y que pregone que en una elección interna del PJ se jugaban los próximos treinta años de toda la sociedad, esa misma elección que después de perder quisieron encargarse de decir que no tenía importancia”.
