Río Gallegos.- Los vecinos de la comisión de fomento de Lago Posadas ratificaron por unanimidad la necesidad de que el pueblo deje de denominarse Hipólito Yrigoyen. Los habitantes de la pequeña comarca se reunieron ayer en la única escuela, y en asamblea popular expusieron porque el pueblo debe llevar una sola denominación, y que la misma debe ser la de Lago Posadas. Lo expuesto en la asamblea será elevado a la Legislatura, la cual deberá confirmar la decisión de los habitantes de la localidad ubicada en la zona noroeste.
El diputado Sebastian Gatti, uno de los impulsores del cambio de nombre, remarcó que los vecinos dejaron en claro que esta necesidad “tiene que ver con una cuestión netamente de identidad, y no política”.
Otro de los legisladores que respaldan que se ratifique una denominación del pueblo, es Silvio Suárez, quien adelantó que entre la documentación que se llevará a la Legislatura para que sea analizado el pedido de los vecinos, hay fotocopias de DNI, actas de nacimiento, certificado de expendio de bebidas alcohólicas emitido en el año 1990 por parte del Ministerio de Gobierno, Constancias de Inscripción en AFIP y fotografías. Este material que “es sumamente importante, porque demuestra que todos estos organismos emiten documentación con la inscripción de Localidad: Lago Posadas, lo que también respalda la voluntad del pueblo”, señaló el diputado.
El comisionado de fomento, Francisco Vásquez, afirmó que “todos los vecinos pidieron que se llame Lago Posadas” y votaron por “esta identidad”. Asimismo aclaró que la ratificación de la denominación “no tiene un tinte político”, y “la gente esta convencida que se debe llamar Lago Posadas”.
Vázquez remarcó que las principales actividades de la zona son el turismo y la ganadería.
Cabe destacar que Lago Posadas fue el nombre que los vecinos reconocían como su lugar de residencia desde principios de siglo XX, cuya historia se remonta a los primeros asentamientos de la compañía ganadera “Hobss & Company”, oportunidad en la que se construyeron los primeros edificios y comenzó el poblamiento de la zona, y con ello la creación de la Escuela Hogar N° 1, en las instalaciones del casco de la estancia Posadas.
Alrededor de esta incipiente actividad económica ganadera, fue que los vecinos comenzaron a trasladarse hacia allí, en busca de mejores oportunidades de trabajo, y con la creación de la escuela, las familias completas comenzaban a constituir lo que para ellos siempre se denominó Lago Posadas.
Posteriormente, por Ley Provincial N° 103, en el año 1959 se procedió a denominar a la localidad con el nombre de Hipólito Yrigoyen, novedad sobre la que los pobladores tomaron conocimiento recién en el año 1982, con la conformación de la primera comisión de vecinos.
La UCR denunció la semana pasada que un grupo de legisladores de la agrupación kirchnerista de La Cámpora y el Partido Justicialista avanzaba con un proyecto para remplazar el nombre de la comisión de fomento Hipólito Yrigoyen.
La iniciativa del oficialismo ya obtuvo dictamen de la Comisión de Asuntos Constitucionales y de Legislación General y está lista para convertirse en ley.
La UCR en pleno rechazó la medida y destacó que se trata de un agravio a la memoria colectiva nacional.
“Este tipo de medidas no ayudan a construir una provincia mas grande y no soluciona ni ataca los problemas reales que tienen los vecinos de Santa Cruz. En lugar de trabajar para que haya mas oportunidades y mas justicia están tratando de reescribir la historia y borrar el legado de los lideres nacionales”, destacó Eduardo Costa, diputado nacional y presidente de la UCR Santa Cruz.
Juan Hipólito del Sagrado Corazón de Jesús Yrigoyen Alem nació el 12 de julio de 1852 y murió el 3 de julio de 1933 en Buenos Aires. Fue un político que llegó a presidente de la Nación en dos mandatos (1916-1922 y 1928-1930) y figura relevante de la Unión Cívica Radical. Fue el primer presidente de la historia argentina en ser elegido por sufragio universal masculino y secreto.
Uno de los hechos de violencia extrema que ocurrieron en su primera presidencia fue conocido como “Patagonia rebelde”, cuando en una rebelión en provincia, entre 1920 y 1921, una huelga contra la explotación de los obreros por parte de sus patrones, fue reprimida por el ejército al mando del teniente Héctor Benigno Varela.